El origen y las consecuencias emocionales de la disfunción eréctil, más allá de las causas orgánicas

Publicado en: 3 de julio de 2024  y atualizado en: 11 de julio de 2024
  • Para compartir
Escuche el texto Detener el audio

La disfunción eréctil (DE) afecta a un porcentaje importante de la población masculina, estimándose que el 35% de los hombres entre 40 y 70 años pueden padecerla. El grado en que la DE puede manifestarse es variable y comprende un espectro de situaciones:                                           

  • Poder alcanzar erecciones ocasionalmente pero no siempre que se desea tener relaciones sexuales.
  • No tener erecciones el tiempo necesario para mantener relaciones sexuales.
  • No tener erecciones en ningún momento.                                                                                                                                

Si bien con el envejecimiento se van incrementando las posibilidades, la vejez no necesariamente debe vincularse de manera directa y lineal con la prevalencia de la DE.

En algunas ocasiones, es posible identificar claramente una causa orgánica que explique estos trastornos. Así, por ejemplo, se conoce que en los hombres con diabetes se incrementa 2 a 3 veces la posibilidad de padecer este tipo de disfuncionalidad. Por otro lado, se describen otras patologías y situaciones que -más allá de sus propios síntomas- pueden expresarse como DE: hipertensión arterial, aterosclerosis, hipercolesterolemia, el consumo de algunos medicamentos, enfermedades prostáticas y de la vejiga, determinadas cirugías y terapia radiante en la zona pélvica, etc.

De igual manera, se han identificado determinados hábitos y factores de riesgo que impactan de manera negativa y favorecen la instalación de la DE

       

 

 

 

 

 

Cuando se evalúa la esfera emocional es importante considerar que la DE puede considerarse causa o consecuencia de trastornos psicológicos. En este sentido, luego de descartar el origen orgánico, es posible profundizar en el hallazgo de cuadros de ansiedad, depresión, estrés, etc, como causas que pueden acompañar algunos casos de DE. 

El equipo liderado por el Dr. Osman Topak desarrolló un trabajo muy interesante publicado en 2023 en la revista especializada Medicina. Se propusieron indagar sobre el impacto de diferentes traumas emocionales infantiles en la génesis de la DE en la edad adulta.  Para ello emplearon -entre otras herramientas- la escala Childhood Trauma Score como fuente de relevamiento de datos (cuando más elevado es el puntaje alcanzado, existe mayor asociación con trastornos emocionales; todo ello basados en subescalas de abuso físico o emocional, negligencia paterna, etc.).  Participaron de la experiencia un total de 80 pacientes, 40 de los cuales referían síntomas de DE y otros 40 que integraban el grupo control. En los primeros se habían descartado las causas orgánicas de DE, por lo cual era factible atribuir el trastorno a procesos emocionales o psicológicos. El rango de edad de la población total resultó muy amplio (29 a 62 años; con una media de 39,3 años), mientras que alrededor del 90 % de los hombres evaluados era casado.  Los resultados arrojaron una puntuación promedio de 41,2 para aquellos hombres que padecían DE y 32,5 para quienes integraban el grupo control, diferencia que resultó estadísticamente significativa. Los investigadores concluyeron que el trauma psicológico o emocional infantil y el tiempo transcurrido sin tratamiento, fueron predictivos en la incidencia de DE. De esta forma, factores tales como el apego emocional seguro y la autoestima jugaron un papel importante en todo el proceso.

En otra experiencia anterior, un grupo de médicos españoles evaluó la situación inversa. En este caso, tomando una población de pacientes con diagnóstico confirmado de DE se determinaron los niveles de autoestima y autoconfianza, empleando escalas específicas para dimensionar estas cualidades. Cuando los resultados en estos pacientes se compararon con los de un grupo control, se pudo confirmar que la DE no afecta exclusivamente la función sexual y que su impacto negativo se puede transferir a otras áreas de la vida en las que la autoestima y autoconfianza cumplen un papel importante.  

Referencia Bibliográfica

(1)        Topak, O. et al: An Evaluation of Psychogenic Predictors of Non-Organic Erectile Dysfunction - Medicina 2023, 59, 1195

(2)        Martín Morales A. et al: Repercusiones psicológicas de la disfunción eréctil sobre la autoestima y autoconfianza - Actas Urol Esp 2005; 29 (5): 493-498

Este material es sólo para fines informativos. No debe ser utilizado para realizar el autodiagnóstico o la automedicación. En caso de duda, siempre consulte a su médico.
  • Para compartir
¿Encontraste útil este contenido?